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Jóvenes de Fé - linea telefonica compartida
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Línea Telefónica Compartida
Cuando tenía seis años de edad, mis padres instalaron una línea telefónica por primera vez en mi hogar. Vivíamos en un área muy rural, así que era un lujo tener teléfono, algo que nunca habíamos experimentado antes. Debido a que las líneas telefónicas privadas eran muy costosas, mis padres optaron por la opción de compartir la misma línea con cuatro familias más. A esa opción se le llamaba “party line,” ¡pero no tenía nada de festivo! [*] Para hacer una llamada telefónica, la línea debía estar desocupada, y existía una sola forma de verificarlo; levantando el auricular y escuchando la conversación. Si oíamos que alguien estaba hablando, colgábamos y esperábamos unos minutos, intentándolo nuevamente.
Era una práctica común de las personas de aquellos tiempos, escuchar las conversaciones telefónicas de sus vecinos y así saber más acerca de sus vidas. En nuestra área, comenzaron a correr muchos rumores y en más de una ocasión puedo recordar a un vecino compartiendo un jugoso chisme que había escuchado a través de la “línea compartida”, y todo aquel que escogía hacerlo, ¡tenía sus oídos repletos de ellos!
Cuida Tu Lengua
Las líneas telefónicas compartidas son cosa del pasado, pero, tristemente, no ocurre así con los chismes. Debemos elegir en cuanto a compartir y escuchar rumores acerca de otras vidas, y las Escrituras nos llaman a escoger sabiamente.
“…que refrene su lengua de hablar el mal y sus labios de proferir engaños” (Salmos 34:13, NVI).
“Los malvados caen en la trampa de sus propias mentiras; los buenos triunfan sobre el mal” (Proverbios 12:13, TLA).
Dios nos llama a escoger hablar bien de los demás y cuando nos encontramos con alguien que está tratando de difamar el carácter, las motivaciones o las cualidades de otra persona, tenemos la misma opción de hacer lo que hicimos cuando teníamos la línea telefónica compartida; “desconectarnos” y escoger no oír. Con la ayuda de Dios, nosotros podremos mantener una “línea privada.”
[*] Chiste relacionado con la palabra party, cuyo significado es “fiesta”. Nota de la traductora.
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